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Gobierno reitera que garantiza la estabilidad de precios de los combustibles
- Miércoles, 17 Agosto 2022 23:58
FOTO: MINISTERIO DE HIDROCARBUROS Y ENERGÍA
Medida: Bolivia debe importar diésel e insumos y aditivos para la gasolina. A causa del conflicto Rusia-Ucrania, el costo de estos líquidos se incrementó sustancialmente en el exterior, ocasionando que Bolivia importe estos productos a un precio superior al de años anteriores. Sin embargo, el Gobierno Nacional mantiene congelados los precios en el mercado interno.
En el sitio web del Ministerio de Energía e Hidrocarburos informan que Bolivia es uno de los pocos países de América y del mundo que mantiene estable los precios de la gasolina, el diésel, el gas natural vehicular (GNV) y el gas licuado de petróleo (GLP) que se comercializan en el mercado interno, pese al incremento del precio internacional del petróleo crudo, ocasionado por el conflicto entre Rusia y Ucrania, porque mantiene los precios “congelados” en el marco del Modelo Económico Social Comunitario Productivo, para “reducir el riesgo de una ola de inflación que desataría el incremento en el valor de los carburantes”.
Detallan que Bolivia es productor de gas, pero no de petróleo, por tanto, debe importar diésel e insumos y aditivos para la gasolina. “A causa del conflicto Rusia-Ucrania, el costo de estos líquidos se incrementó sustancialmente en el exterior, ocasionando que Bolivia importe estos productos a un precio superior al de años anteriores. Sin embargo, al Modelo Económico Social Comunitario Productivo, el Estado mantiene congelados los precios en el mercado interno”.
Recuerdan que desde hace más de 15 años, los bolivianos adquieren la gasolina especial a Bs 3,74 por litro (Bs/l), el diésel a Bs 3,72 por litro, el metro cúbico de GNV a Bs1,66 y una garrafa con GLP a Bs 22,5; el precio del gas domiciliario es uno de los más baratos de la región, con un costo que oscila entre los Bs 10 y Bs 12 al mes.
“Además, y no menos importante, el sostenimiento del precio de estos hidrocarburos es un factor determinante para controlar la inflación. Un mínimo incremento en el precio de los combustibles desataría la subida de precios del transporte público, de los fertilizantes, de los alimentos y de casi todos los productos y servicios en el país; y, posteriormente, aunque los combustibles volvieran a su precio actual del mercado interno, no ocurriría lo mismo con los productos y servicios”, advierte. Y “por tanto, la subida del costo de los carburantes no solo afectaría a los conductores particulares, al transporte público, al agro o a la industria, sino que tendría impacto directo en el bolsillo de cada ciudadano del país”, se señala.
Abastecimiento garantizado
El 19 de enero de 2022 se promulgó el Decreto Supremo 4661, que establece la reducción del gravamen arancelario a 0% para la importación de petróleo crudo y que permite a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) definir los volúmenes que se deban importar de ese hidrocarburo en función a la necesidad del mercado interno y la capacidad de procesamiento de las refinerías. “Con esta norma, el gobierno nacional, mediante el Ministerio de Hidrocarburos y Energías y sus entidades bajo tuición: YPFB y la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), garantiza el abastecimiento de carburantes para todos los sectores en el país”.
Aclaran que “el incremento en los recursos erogados para la subvención de los combustibles no se debe a que el consumo interno se haya disparado o a que haya una menor producción de líquidos en el país, como algunos medios de comunicación han señalado malintencionadamente. El aumento se debe por la subida de precios del petróleo, como se explicó anteriormente”.
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