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Floricultores en crisis, venden a precios ínfimos y aún no hay política de fomento para exportar
- Martes, 09 Noviembre 2021 23:17
AGRONEWS
Quiebra: La docena de rosas, que normalmente se vende en 20 bolivianos, se llegó a rematar en 2.50, en octubre. En Cochabamba hay 15 mil productores que fueron afectados por la crisis económica a causa de los confinamientos por el coronavirus.
Los floricultores se vieron obligados a vender su producción a precios irrisorios, regalar, para que no se echen a perder sus flores, e incluso botar lo que no se comercializaba en la semana, afirmó el ejecutivo de la Federación Departamental de Floricultores de Cochabamba, Wilfredo Balcera.
La crisis en la floricultura llegó a tal extremo que, en determinados días, por la madrugada o por la noche, los productores de flores vendieron la docena de rosas en 2.50 bolivianos, cuando normalmente se comercializa este paquete, como mínimo, en 20 bolivianos. Eso sucedió a mediados de octubre.
Una floricultora de Quillacollo, quien prefirió guardar su nombre en reserva, señaló que el costo de producción de una docena de rosas es de 7.50 bolivianos, es decir que trabajaron a pérdida por varias semanas.
El lilium (azucena), que se comercializaba normalmente el “amarro” entre 40 y 70 bolivianos, se vendió en cinco bolivianos.
En Todos Santos, la docena se llegó a vender hasta en 40 bolivianos, debido a la escasez y por tratarse de una época alta.
Sin embargo, tras esta festividad, el precio de las flores bajó nuevamente y los paquetes se rematan en la feria de Quillacollo, sobre la avenida Blanco Galindo y cerca del templo de San Ildefonso.
El “amarro” de gladiolos (unas seis flores), por ejemplo, se vende desde 1 boliviano cuando se trata del descarte, lo que antes se despachaba en 8 bolivianos.
Pérdidas
El ejecutivo de la Federación Departamental de Floricultores de Cochabamba, Wilfredo Balcera, señaló que la crisis por la que atraviesa este sector, debido a los confinamientos a causa de la pandemia, afecta a los 15 mil productores que trabajan en Cochabamba, los cuales están ubicados en los municipios de Quillacollo, Tiquipaya, Vinto, Sipe Sipe, Cercado, Sacaba y en las poblaciones del Trópico y Valle Alto.
Cada mes se producen al menos 70 mil paquetes de rosas, gladiolos, lirios, crisantemos, ilusiones, margaritas y claveles, entre otros, y se venden en mercados de Cochabamba, la mayor parte, un pequeño porcentaje se lleva hasta La Paz, Santa Cruz y Potosí, y un mínimo volumen se exporta a Estados Unidos.
“Hace 14 años se exportaba una importante cantidad de flores a Estados Unidos, gracias a un convenio con USAID, pero después de que se cortó el acuerdo, la floricultura empezó a caer en lo que se refiere a los precios”, apuntó la floricultora.
Agregó que es mínimo el apoyo del Gobierno y no hay políticas para fomentar la exportación, por lo que se dejó de producir con ese fin y, más bien, se traen al país flores de Perú y Ecuador, lo que agrava la situación de los floricultores
Balcera afirmó que los productores de flores fueron los más golpeados por la pandemia debido a que, según sus cálculos, hubo una pérdida de más de 15 millones de bolivianos por el cierre de cementerios, iglesias y la cancelación de las bodas, entre otras actividades.
Con la ampliación del horario de circulación en Cochabamba y la reapertura de las actividades económicas, los floricultores han empezado a vender mayores volúmenes de flores, pero los precios aún siguen bajos.
En el municipio de Quillacollo, uno de los que tiene mayor vocación productiva, hay viveros que se especializan en la producción de rosas, claveles, liliums, especialmente en el sector de Bella Vista.
En la localidad de El Paso, Quillacollo, la situación de los floricultores es también preocupante, según la floricultora Noemí Ramos, quien puntualizó que se ha producido poco este año, porque la gestión pasada la mayor parte de los floricultores quedó en la quiebra.
Los floricultores piden condiciones mínimas para poder vender su producción, es decir, mercados cómodos donde puedan asentarse, porque ahora venden sobre las aceras, y que se aliente la exportación.