- Viticultura
La industria vitivinícola dejará de comprar al menos un 30% al productor
- Viernes, 15 Octubre 2021 01:31
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Impacto: El contrabando y la pandemia azotaron a la producción e industria vitivinícola en Bolivia. Aunque la producción de uva tendrá un buen rendimiento para esta vendimia que se avecina, la industria dejará de comprar al menos un 30% a los productores, porque se encuentran estocados de vino.
El mercado de vinos y singanis ha perdido un espacio del 25 al 30%, que lo está ocupando el contrabando que ingresa sin pagar gravamen. Competir en esa situación desigual es complicado, no es lo óptimo. Lamentablemente el contrabando va ganando mayor terreno, no hay políticas claras por parte del gobierno para frenar esta situación, sostuvo Fernando Galarza, Gerente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Industriales Vitivinícolas (ANIV).
Sin duda, al igual que el contrabando la pandemia también ha golpeado este sector que aglutina toda una cadena productiva desde las industrias productoras, los pequeños productores, los campesinos que proveen la uva, y otros sectores como los intermediarios de etiquetas, de corchos de botellas que también se ven afectados.
“El contrabando nos golpea muy duro y no encontramos respuestas sólidas por parte del gobierno nacional que son los llamados a frenar este flagelo que está arrinconando contra las cuerdas a los productores. Ya hicimos un llamado a nuestras autoridades, sobre todo a las departamentales y nacionales”, dijo Galarza.
Producción
La producción vitivinícola en toda Bolivia alcanza los 14 millones de litros de vino cuando se tiene una capacidad instalada de 22 millones de litros. En singani, el 2020 se produjo 4,5 millones de litros y se tiene una capacidad para producir 8 millones de litros. “Al año se verá caída similar a la de este año”, sostuvo Galarza.
Un productor que produce menos de 1 hectárea, es decir ¾ de hectáreas, se considera que su familia sale del límite de la pobreza. Hay productores que tienen desde media hectárea hasta 5 u 8 hectáreas, y paulatinamente están creciendo los cultivos.
Se calcula que son más de 6 mil familias que viven del rubro vitivinícola, con cuatro integrantes promedio, son 24 mil personas que trabajan directamente produciendo uva para el sector. El sector genera cerca de 5 mil empleos directos e indirectos tanto en bodegas como en campo. “Es un efecto enorme si son 24 mil personas las que trabajan del cultivo de la vid, el 30% de esa gente se verá afectada porque no va a tener donde acomodar su producción”, dijo el directivo.